¿Alguna vez se pregunta si está tratando a su hijo con demasiada dureza? ¿Te preocupa que tus expectativas sean demasiado altas? ¿Te has preguntado alguna vez si las repercusiones que transmites a tu hijo son demasiado duras?
Los padres son estrictos por varias razones, algunas de las cuales son beneficiosas y otras interesadas. Algunos padres tienen grandes expectativas puestas en sus hijos; les inculcan autodisciplina haciéndoles responsables.
Estos padres se preocupan por el bienestar de sus hijos. Algunos padres estrictos, en cambio, son controladores porque temen ser tachados de padres ineptos si sus hijos cometen errores. Estos padres están más preocupados por sus sentimientos e inquietudes personales que por el bienestar de sus hijos.
A continuación se exponen algunas características de la crianza severa:
Usted da poca o ninguna razón para dar castigos
Este tipo de padre no suele tener miedo a utilizar la disciplina corporal, que a menudo incluye los azotes. Cuando se infringen las normas, reaccionan rápida y agresivamente en lugar de utilizar el refuerzo positivo.
Su hijo dice muchas mentiras
Aunque es natural que los niños mientan de vez en cuando, los estudios demuestran que la disciplina severa engendra buenos mentirosos. Si eres excesivamente duro con tu hijo, lo más probable es que mienta para evitar el castigo.
Sigue una estricta política de no tolerancia
Aunque es crucial tener unas directrices claras, también es fundamental reconocer que siempre hay excepciones a las normas. Muéstrese dispuesto a examinar el comportamiento de su hijo en el contexto de la situación en lugar de adoptar una actitud autoritaria en todo.
Su hijo está sometido a más restricciones que otros niños
No hay nada malo en tener normas que difieran de las de los demás padres. Sin embargo, si eres sistemáticamente el padre más riguroso de la sala, puede ser un indicio de que tus expectativas son demasiado altas.
Tienes que lidiar con la falta de disciplina de los demás
A los padres estrictos les cuesta tolerar el estilo de disciplina de cualquier otro adulto. Está bien que los niños estén expuestos a adultos que tienen reglas y estilos de disciplina diversos.
Has hecho una larga lista de normas para tu hijo
Las normas son beneficiosas, pero demasiadas pueden ser perjudiciales. Mantén unas normas básicas e incluye sólo las más importantes para que tu hijo las recuerde. Haz una lista de las normas de la casa y guárdala en un lugar donde puedas consultarla siempre que la necesites.
Vergonzoso
Los padres autoritarios pueden ser duros y vergonzosos, y utilizar comentarios como "¿Por qué haces eso constantemente?" para coaccionar a sus hijos a seguir las normas. "¿Cuántas veces tengo que decirte lo mismo?" o "¿Cómo es que no puedes hacer nada bien?". En lugar de centrarse en estrategias para mejorar la autoestima de sus hijos, muchos padres creen que avergonzarles les empujará a hacerlo mejor.
Conclusión
Aunque un método estricto o autoritario puede funcionar en los casos en que se requiere un cumplimiento estricto de las normas, puede ser contraproducente cuando se utiliza como estrategia de crianza.
Es una buena idea empezar a buscar formas de utilizar un estilo más indulgente con sus hijos si ha notado que su forma de criar tiende más hacia el extremo autoritario del espectro.